Introduction

FAMS-COCEMFE Sevilla exige acciones que abran la puerta a la estabilidad emocional y la felicidad de las personas gravemente afectadas por una discapacidad

FAMS-COCEMFE Sevilla exige acciones que abran la puerta a la estabilidad emocional y la felicidad de las personas gravemente afectadas por una discapacidad

• Desde la Federación se exigen acciones positivas en favor de la vida de personas en situaciones complicadas y con sus capacidades gravemente afectadas.

• Las personas con discapacidad no han ido a la entidad a pedir ayuda para suicidarse, pero sí para solicitar información sobre ayudas y acciones que les ayuden a llevar una vida más normalizada con respecto al resto de la sociedad.

La Federación Provincial de Asociaciones de Personas con Discapacidad Física y Orgánica de Sevilla (FAMS-COCEMFE Sevilla), en apoyo a la nota de prensa publicada por la Federación de Asociaciones de Personas con Discapacidad Física y Orgánica de la Comunidad de Madrid (FAMMA-Cocemfe Madrid) la semana pasada, y ante la consideración, por parte del Congreso, de aprobación de una proposición de ley para regular la eutanasia en España como un nuevo derecho individual para personas mayores de edad con una enfermedad grave e incurable y con discapacidad grave crónica, exige acciones positivas en favor de la vida de personas en situaciones complicadas y con sus capacidades gravemente afectadas.

“Las personas con discapacidad no han acudido a nuestra entidad a pedir ayuda para suicidarse, pero sí para solicitar información sobre ayudas y acciones que les permitan llevar una vida más normalizada con respecto al resto de la sociedad. Es normal que, si la vida de una persona gravemente afectada transcurre en una cama mirando el techo, con el transcurso del tiempo dinamite cualquier estabilidad emocional, ocasionando que el afectado tenga ganas de ponerle fin a esa situación. Sin embargo, con una responsabilidad política que le ofrezca medidas de apoyo, recursos y oportunidades, esa persona puede ser perfectamente feliz. Ser diferente y tener otras capacidades y limitaciones no es un problema”, sentencia el presidente de FAMS-COCEMFE Sevilla, Juan José Lara Ortiz.

En este sentido, la ONG promueve acciones directas para personas gravemente afectadas como visitas turísticas, vacaciones, recorrido de vías verdes, conocimiento de patrimonio, deporte adaptado, sexualidad asistida, perros de asistencia y terapias, uso de tecnologías de la información y la comunicación (videojuegos en red, Internet, etc.) … Todo un abanico de actividades que pueden realizar personas con limitaciones severas, acompañadas de un servicio de voluntariado que cubra sus necesidades. FAMS-COCEMFE Sevilla las proporciona en la medida de sus posibilidades y recursos. Por eso, reclama la concienciación y apoyo de la Administración, así como más ayudas para poder ofrecer un servicio “fundamental” para el colectivo, ya que estas prácticas mejoran la salud física y mental.

La discapacidad, ya sea por motivos de nacimiento o adquirida, llega a ser asimilada. No obstante, la sociedad y las políticas sociales recuerdan constantemente a las personas su situación de dependencia con leyes que no llegan a cumplirse y ayudas escasas e insuficientes. Asimismo, aspectos fundamentales de la vida como el ocio, el acceso a la formación y al mercado laboral, o las relaciones personales y sexuales para las personas gravemente afectadas, son olvidados para la Administración, pero son personas con discapacidad con gustos y necesidades tanto biológicas como fisiológicas y no se puede ignorar.

Para facilitar la vida de estas personas es muy necesaria la ayuda personal y económica. Se necesitan modificar las políticas sociales para que fomenten los asistentes personales para el colectivo y el acompañamiento. No se debe dejar de lado al cuidador. ¿Quién cuida de él? El respiro familiar es algo indispensable que mejora la vida del núcleo familiar.

Mientras las personas se “conformen” con pasar horas sin sacar provecho de ellas entre cuatro paredes, sus ganas de vivir seguirán mermando. Se deben derribar los muros sociales y físicos, y la sociedad debe ser consciente de que una vida activa, en todos sus aspectos, es beneficiosa para todos.

La organización quiere trasladar a la opinión pública su postura, respetando todas las opiniones, pero reclamando una política de apoyo para el colectivo.